Los días 11, 12 y 13 de septiembre la Comisión de la Mujer, junto con compañeros de otras comisiones del Centro Uruguayo de Madrid, participamos en el III FORO SOCIAL MUNDIAL DE LAS MIGRACIONES, en Rivas Vaciamadrid. Se trata de un espacio bianual de encuentro y sensibilizacion social que se dan las diferentes organizaciones, redes y movimientos sociales que desde distintos lugares del planeta trabajan en defensa de los derechos de los migrantes. Fue una experiencia muy positiva. Nuestro aporte desde el área de la mujer fue de participación, y de apoyo a los testimonios que allí se escucharon, en muchas ocasiones sabiendo que hablaban por propia experiencia. No hemos salido indiferentes, hemos estrechado lazos con las distintas ongs y organizaciones, sabiendo que es la mejor manera de aunar fuerzas.

Pueden encontrar la declaración final del FSMM en la siguiente dirección: http://www.fsmm2008.org/noticias/vernoticia.php?id=28
Y pueden ver el Foro en imágenes en: http://es.youtube.com/fsmm2008

Participamos en algunos talleres sobre los que nos gustaría comentar aquí. Se hizo referencia insistentemente al concepto de ciudadanía global, que traspasa las fronteras nacionales y se basa en considerar por encima de las diferencias entre naciones, el principio de universalidad (como un constructo que considere las diversidades) y de igualdad entre seres humanos (igualdad de derechos y obligaciones, cada uno vale por ser humano). Es imprescindible considerar que la ciudadanía global pone en tensión a la ciudadanía de proximidad, que es la que sentimos como nuestra con relación a nuestros grupos de referencia, la que constituye más cercanamente nuestra identidad. Existe la percepción de que la ciudadanía global pone en riesgo la ciudadanía de proximidad, y la ciudadanía de proximidad se resiste a la ciudadanía global. Se presentaron propuestas de trabajo para elaborar esta tensión. También se hizo referencia a experiencias concretas como la de los desplazados en Bogotá, que aunque actualmente viven en la ciudad
continúan organizados en sindicatos agrarios, principalmente, se niegan a ser derrotados y resisten. Reclaman su reconocimiento como víctimas, que han sido ignoradas sistemáticamente por el estado, en un contexto de violencia institucional muy fuerte. Por ser desplazados han perdido sus derechos como ciudadanos. Pero por ser víctimas ello no significa que sean seres derrotados política o socialmente, pueden levantarse y reclamar sus derechos.
Reclaman volver a ser considerados personas que pueden producir, ser factor de lucha y de cambio social en su país. En otro taller se trabajó sobre el lenguaje utilizado en los medios con respecto a la “inmigración”, donde se utilizan términos que colaboran a la criminalización del migrante y del acto migratorio. Se trasmitió la experiencia de radios comunitarias y redes de radios, que apuestan a rescatar (más allá del dolor y las situaciones difíciles propias de la migración) los aspectos positivos y de relación intercultural, de crecimiento y enriquecimiento de todas las partes en estos procesos. Y la experiencia de dar voz a los migrantes. Ver que es posible construir otros símbolos que identifiquen a las migraciones y utilizar un lenguaje que no sea discriminatorio y que no colabore en la estigmatizacion de las personas migrantes. Para muestra de ello se organizó un Foro de Radios en el patio central del recinto, y se trasmitió en directo desde el FSMM dando cabida a los participantes presentes. Algunas conclusiones del taller sobre mujeres inmigrantes fueron las siguientes:

1º La mujer inmigrante es doblemente vulnerable por una parte por el hecho de ser mujer y por otra por ser inmigrante. Como en todos los sitios el peso de la casa cae sobre nosotras, las culturas machistas existen en todas las sociedades (aunque algo está cambiando) nuestros hijos, el trabajo, etc, pero al mismo tiempo el ser inmigrante, que no es poco.

2º El trabajo, que en la mayoría de los casos resulta frustrante porque sólo podemos acceder al cuidado de niños, mayores, limpiezas, etc. Cuando en muchos casos tenemos un gran bagaje cultural, títulos universitarios, se ponen muchas trabas para convalidarlos y eso crea frustración.

Como se puede frenar el abuso de los gobiernos?

3º La más importante de las conclusiones es que unidas desde todos los ámbitos, y con el apoyo mutuo debemos exigir nuestros derechos, así como respetamos las leyes. Las políticas de gobierno entre otras cosas están hechas para el hombre, y se olvidan del enorme aporte social, cultural,
económico de la mujer.

También es importante impulsar cambios en los países de origen para ayudar a las mujeres que allí se encuentren y para el retorno.

Tratemos de integrarnos en asociaciones, aunque nos parezca que antes tenemos prioridades que debemos solucionar, como nuestros problemas de papeles, vivienda, trabajo.

4º El racismo, la discriminación, es algo que lamentablemente se está arraigando más aún, contra ello se debe hacer un frente común, en definitiva afecta a las comunidades, ciudades, en las cuales estamos conviviendo, por lo que en menor o mayor grado nos afecta a todos/as.

Para finalizar diremos que en el FSMM se abordaron importantes temáticas y problemáticas, se trasmitieron experiencias colectivas, se denunciaron abusos e injusticias sociales vinculadas a las condiciones de vida de los migrantes y sus familias, se contaron historias en primera persona. Hubo lugar para el encuentro y para la emoción, para los abrazos y para intercambiar contactos. Y sobre todo para elaborar puntos de partida y desarrollos colectivos que fortifiquen las redes. Aun hay mucho por hacer y parece que la palabra 'juntos' resuena en Rivas Vaciamadrid. 'Nuestras voces, nuestros derechos. Por un mundo sin muros'. La próxima cita es en Quito 2010. Ojalá podamos repetir y tener más presencia desde la Comisión de la Mujer del Centro Uruguayo de Madrid, donde venimos trabajando estas temáticas y apostando por la sensibilizacion social a través de dar visibilidad a nuestras propias voces y experiencias.